El fuego siempre ha fascinado al ser humano. Una fogata crepitante añade un toque de emoción a la vida al aire libre. No obstante, si se gestiona de forma inadecuada, también puede causar estragos. El derecho de acceso público (“allemansrätten”), que te ofrece una oportunidad única de pasar tiempo en la naturaleza, depende de que juntos asumamos nuestra responsabilidad. Sin embargo, no te autoriza a prender fuego, sino simplemente la posibilidad de hacerlo en condiciones seguras bajo tu propia responsabilidad.